"Reconstruida en primavera bajo un cielo de abril cuajado de nubes volanderas y estrellas semiocultas, la hiedra recompone su piel abandonada. Brillando de verdor, con gotas de destellos que iluminan y suavizan su tersura, acaricia con sus sombras el objetivo de la cámara, que no sabe cuajar su realidad sencilla y múltiple. Tras la sedosa lluvia y el sol asustadizo, emergen sus hojas dibujando corazones de tres picos, parecidos al tuyo, que no dejó al mío recrearse en el letargo mudo de sus sueños imposibles, porque quedó incrustado entre la espada y la pared trepada por la hiedra, y murió sin saber de sus verdes hojas, ni de la suavidad de sus enrevesados abrazos."
"Mañana comienza abril
y el campo verde se pone,
los pájaros vuelan alto
y dan su canto a las flores.
Mañana comienza el mes
que precede al de María,
las aguas del río suenan
a cánticos de poesía.
Las nubes van anunciando
empujadas por la brisa,
una gama de colores
que la primavera pinta.
Mañana comienza abril
y alrededor de mi pueblo,
el paisaje se renueva
bajo el manto azul del cielo."
A lo lejos, los olivos
contemplan la soledad de la flor
rodeada del verdor apabullante
de la siembra.
Se siente abril en el aroma
de las calles y de los campos.
Lloverá finalmente
y la primavera, por fin podrá
demostrar su musical presencia,
y el agua de los arroyos
acompañará con sus notas
el despliegue ,
mojando la tierra y la flor,
y uniéndose al canto
de esta bella estación,
que nos inundará
de versos cadenciosos y dulces."
"La primavera de abril
es otra primavera.
Es el despertar,
el renacer del campo,
de las flores silvestres
que regalan sus colores al mundo.
A punto de estallar
en un blancor de suaves pétalos,
la jara, agreste y delicada,
se adhiere a la primavera
bajo el cielo mediterráneo,
perfumando las veredas,
mientras saluda vistosa
al caminante .
Mañana ya es abril, otro abril,
Nunca el mismo abril,
pero, como todos los abriles,
me siento ingrávido,
dibujando los sueños
como cuando era niño
y tenía tiempo de hacerlos míos."